Existe una energía primaria, creadora y creativa que mueve el universo. Todos los seres vivos venimos de esta energía. En los animales y otras formas de vida esta energía se manifiesta como creación biológica y es la responsable de la evolución de las especies. En el ser humano, además de ser creadora, esta energía se convierte en creativa en todos los niveles: físico, energético, mental, emocional y espiritual. Ya intuirás que esta energía de vida es la energía sexual.

Cuando sentimos atracción, excitación, despertar, conciencia plena, pasión, interés, inspiración, deseo, creatividad, entusiasmo, etc., en cada una de estos estímulos, la energía sexual está presente y está operando. Cada vez que sentimos cualquiera de dichos estímulos tenemos que poner nuestra atención en la energía que experimentamos, nutriéndola con nuestra atención, experimentándola con gozo y manteniéndola viva.

La energía de vida y su manifestación en los chakras.

Se tiene la concepción que la energía sexual solamente se manifiesta en el primero y segundo chakra y que trabajando en ese espacio la sexualidad se resolverá por arte de magia. Si bien es cierto que estos chakras son el principal asiento de la energía creativa conocida como kundalini, la expresión sexual o sexualidad se vive en todos los chakras, del primero al séptimo. En otras palabras no podemos evolucionar espiritualmente si no evolucionamos sexualmente.

La energía sexual, llamada kundalini, es el gran motor de la vida. Su expresión en cada chakra permite que vivas a la vida a fondo  Esta es la manera en que nuestra energía de vida se manifiesta en los chakras:

Primer chakra. Cuando la energía fluye libremente te conviertes en una persona llena de deseo sexual sano y que necesita liberarse y ser colmado. Si el chakra está bloqueado la energía no fluye y tienes sensaciones negativas respecto al sexo o carencia sexual.

Segundo chakra. Al fluir la energía te conviertes en una persona fortalecida. Llena de vitalidad, con un vigor que emana de un cuerpo saludable, la energía sexual se expresa por el movimiento de la pelvis como una danza. Si se cierra impide fluir de la energía sexual y aparece la tensión y el engarrotamiento. Te sientes critico respecto a tu pareja, insatisfecho, celoso, desafiante. La sexualidad se vive como un ejercicio físico.

Tercer chakra, la energía sexual se experimenta como poder personal, confianza, carisma. El amante se siente dueño de sus emociones, es capaz de establecer una relación de igualdad con su pareja. Si se bloquea el sexo se ve como algo amenazador, controlador, temes que el orgasmo te robe la energía, te cierras al disfrute, no confías en que salga bien.

Cuarto chakra, la energía sexual se vive como un deseo de fusión con otra persona, la necesidad de formar parte de otro, crear pasión de compartir el amor y la alegría, experimentas confianza en el otro, benevolencia. Si está cerrado, sufres de dudas, cinismo y ganas de polemizar.

Quinto chakra. Cuando se abre sabes quién eres, qué es lo que quieres y lo puedes expresar. Te sientes en paz contigo y consigues mantenerte en tu centro aunque ello implique ser diferente a los demás.

Sexto chakra. Cuando está en equilibrio puedes ser receptivo a las ideas de los demás y tu intuición se abre al máximo. No necesitas del lenguaje hablado para comunicarte con tu pareja. Puedes apreciar la realidad y verdad del universo tal y como es.

Séptimo chakra, cuando se abre te sientes espontáneo, alegre, centrado y presente. La vida se vive más allá de los cinco sentidos. La aparente felicidad que has vivido se convierte en un verdadero gozo por la vida que vives a cada instante.

Es imposible sentirse o ser espiritual sin haber explorado, descubierto y haber conocido a fondo las leyes que gobiernan nuestra sexualidad.

Aumkar